Desaparición. Pelé y la política no siempre fueron bien juntos
Consultado sobre los años de gestación del régimen militar (1964-1985) en Brasil en el documental sobre su vida estrenado por Netflix en 2021, el tricampeón mundial respondió: “Para mí, al menos, absolutamente nada ha cambiado. (…) El fútbol siguió de la misma manera”.
En este mismo documental, Paulo César Vasconcellos, una de las figuras del periodismo deportivo brasileño, destaca que Pelé “había aceptado al régimen, que lo trataba bien porque conocía su importancia”. El eterno número 10 “se caracterizó por la falta de posicionamiento político”.
Cuando el ‘Rey’ estaba en su apogeo, luego del tercer campeonato mundial ganado en México en 1970, los militares en el poder no desaprovecharon la oportunidad de utilizar su aura con fines políticos.
Muchas fotos lo muestran muy cerca del dictador Emílio Garrastazu Médici, el general más “duro” del régimen que torturó a cientos de opositores, con un alto saldo de al menos 434 muertos o desaparecidos. Vemos a Pelé sonriendo, abrazándolo o sosteniendo la copa del mundo a su lado.
“Tenía el comportamiento de un negro sumiso, que acepta todo, que no disputa nada”, se burla Paulo Cézar Caju, su compañero durante el título de 1970.
“socialista”
Pero otras fotos más sorprendentes han reaparecido en las redes sociales en los últimos días, cuando la noticia del empeoramiento de su estado de salud se ha extendido por todo el mundo.
Vemos a un Pelé atrevido, con un elegante sombrero gris y abrigo vestido con una camiseta amarilla en la que está escrito en letras grandes “Directo ya”, lema del movimiento por el fin de la dictadura y elecciones presidenciales por sufragio universal directo.
Esta foto, fechada en 1984, fue portada de la revista deportiva brasileña Placar, con el título: “Pelé con cabeza nueva”. En traducción literal, una “nueva cabeza para Pelé”, una nueva mentalidad.
Otro episodio poco conocido en la vida del “Rey” en la década de 1980: en 1989, durante una conferencia de prensa, Pelé anunció que podría postularse para presidente en 1994 y se autodenominó “socialista”.
Terminó sin ser candidato, pero se convirtió en ministro de Deportes del presidente de centroderecha Fernando Henrique Cardoso de 1995 a 1998.
Un ministro muy activo, que ha trabajado mucho por la modernización del fútbol brasileño y por garantizar los derechos de los futbolistas ante sus clubes, lo que le habría valido, según los medios locales, la ira del todopoderoso presidente de la FIFA en la tiempo, su compatriota John Havelange.
“Me hizo amar Brasil”
Pelé, la primera superestrella negra de Brasil, también ha sido criticado con frecuencia por su falta de compromiso con la lucha contra el racismo.
“Me trataban como un mono, un negro, pero no me importaba (…) Prefiero dar ejemplo a mi familia, a mis fans. Esta es mi lucha”, dijo en una entrevista citada en 2020 por El País.
“Estoy absolutamente seguro de que ayudé mucho más a Brasil con mi fútbol y mi forma de vida que mucha gente que se gana la vida haciendo política”, lanzó en el documental de Netflix, señalando en particular que dedicó su gol número mil a los niños que estaban hambre en Brasil en 1969.
Mientras unos lo critican por no haber condenado con más firmeza el racismo, otros creen que el simple hecho de ver a una persona negra destacarse en esta zona de su localidad ya era motivo de inmenso orgullo y esperanza.
“Pelé es la primera persona que me hizo amar Brasil. Ver a un brasileño, como yo, siendo indiscutiblemente el mejor en lo que hacía me hizo pensar que, a pesar de todo, podíamos creer en algo”, tuiteó tras su muerte Silvio Almeida, uno de los intelectuales negros más destacados del país y futuro ministro. de Derechos Derechos del presidente electo de izquierda, Luiz Inácio Lula da Silva.
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