El telescopio espacial ALMA, ubicado en los Andes chilenos, ha reanudado sus operaciones casi dos meses después de que un ciberataque suspendiera sus actividades de exploración del universo, anunció este miércoles el observatorio.
“Reanudar las observaciones científicas fue nuestra principal prioridad después del ataque”, dijo el director de ALMA, Sean Dougherty.
El ataque del 29 de octubre a los sistemas informáticos de ALMA afectó a varios servidores y computadoras operativas críticas, dijo el observatorio en un comunicado publicado el miércoles en un sitio web provisional. Forzó la suspensión de las observaciones astronómicas, limitó sus servicios de mensajería y desconectó su sitio web. El incidente está siendo investigado por la policía chilena.
Dougherty explicó que todos los sistemas críticos del observatorio, como el control del telescopio, los archivos y el procesador de datos, se probaron repetidamente antes de que pudieran reanudarse las observaciones. “Después de recuperar los sistemas informáticos, fue un trabajo enorme hacer las pruebas completas”, señaló.
El Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA), el telescopio más poderoso del mundo para observar gases moleculares y polvo, estudia los componentes básicos de las estrellas, los sistemas planetarios, las galaxias y la vida misma.
Cuenta con 66 antenas, ubicadas a más de 5.000 metros sobre el nivel del mar, en la meseta de Chajnantor, en el desierto de Atacama, uno de los lugares más secos del planeta.
El complejo, que comenzó a explorar el Universo en 2011, colaboró en abril pasado para descubrir la galaxia candidata más distante jamás detectada, ubicada a 13.500 millones de años luz de distancia.
ALMA emplea aproximadamente a 300 especialistas, incluidos 40 ingenieros y técnicos informáticos a cargo de sus poderosas computadoras, servidores, sistemas de almacenamiento de datos y pantallas.
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