Días antes de la coronación de Carlos III, arrestan a un hombre cerca del Palacio de Buckingham

El incidente tuvo lugar el martes por la noche en Londres. Ni Carlos III ni su esposa Camilla estaban en el Palacio de Buckingham en el momento del incidente.

El incidente ocurrió cuatro días antes de la ceremonia de coronación de Carlos III. Un hombre fue arrestado por la policía británica el martes por la noche cerca del Palacio de Buckingham después de que se acercó a las puertas de la propiedad y arrojó objetos, posiblemente cartuchos de rifle, a según la bbc.

Según el Palacio de Buckingham, ni Carlos III ni su esposa Camilla estaban en el palacio en el momento del incidente.

La detención se produjo a las 20 horas y se estableció un perímetro de seguridad por parte de la policía. En un vídeo difundido por el canal australiano Channel 7, podemos ver a un hombre con una larga camisa a cuadros siendo esposado antes de ser escoltado por dos policías.

El hombre es sospechoso de estar en posesión de un cuchillo y un bolso sospechoso. En el lugar, la policía también realizó una explosión controlada como medida de precaución.

Sin heridos ni tiros

Según Scotland Yard, que ha indicado que no está tramitando este caso en esta fase como un expediente de terrorismo, “no se efectuaron disparos ni hubo heridos, ni entre los policías ni entre el resto de personas presentes. Siguen en marcha y las investigaciones están en curso”, agrega la Policía Metropolitana.

Esta detención se produce cuando los primeros fans de la familia real británica ya se han instalado en el Mall, una inmensa arteria londinense que conduce al Palacio de Buckingham. Cientos de miles de personas se esperan en el centro de la capital británica el sábado para la coronación de Carlos III, la primera desde 1953.

La operación de seguridad para proteger la ruta del Palacio de Buckingham a la Abadía de Westminster es una de las más importantes de los últimos años. Contará con francotiradores y agentes secretos, así como con detectores de aeropuerto, perros rastreadores y una zona de exclusión aérea en el centro de Londres.