Los transeúntes y los turistas en Japón se regocijaron el miércoles de poder tomar fotos de santuarios y templos bajo la nieve, incluidas fuertes caídas en todo el país, lo que al mismo tiempo causó grandes interrupciones en el transporte.
“Estas temperaturas están entre las más frías vistas en una década”, dijo a la AFP Takafumi Umeda, funcionario de la Agencia Meteorológica de Japón (JMA).
El organismo advirtió del riesgo de ventiscas, oleaje alto en las costas y hielo en las carreteras.
Según el portavoz del gobierno Hirokazu Matsuno, una persona murió en el país debido a la severa ola de frío, y las autoridades también están investigando otras dos muertes potencialmente relacionadas con el clima.
Cientos de vuelos fueron cancelados debido a las tormentas de nieve y los trenes también se retrasaron o cancelaron, incluso en las líneas de alta velocidad. Los atascos en las carreteras también fueron numerosos.
En el templo Zenkoji, en la ciudad de Nagano, en el corazón de los Alpes japoneses en el centro del país, los visitantes disfrutaron del encantador espectáculo de lugares cubiertos de blanco. Escenas similares tuvieron lugar en el oeste del país como en Kioto, la antigua capital imperial con un rico patrimonio histórico.
“Vine a esquiar, pero la nieve era tan espesa que cambié mi horario y decidí hacer un poco de turismo” en la ciudad, dijo Akiko Sotobori, una turista entrevistada por AFP en Nagano.
En la estación de esquí, “la tormenta de nieve era tan fuerte que no podía ver nada a diez pies de distancia”, dijo.
La capital Tokio y sus grandes suburbios se salvaron, sin embargo, de la nieve, ya que sufrieron un frío más intenso de lo habitual.
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