Live Pro 2 es agradable de usar a diario. Cada auricular cuenta con una superficie táctil perfectamente sensible y de fácil acceso en la parte superior del brazo. Le permite ejecutar muchos comandos que van desde el control de la reproducción hasta la gestión del volumen, incluida la navegación entre pistas. Sin embargo, al igual que Sony, tendrá que elegir entre tres perfiles de control dentro de la aplicación JBL Headphones y, por lo tanto, sacrificar el control del volumen, la gestión de la reproducción o cambiar de un modo de escucha a otro. En cualquier caso, la activación del asistente de voz del teléfono se puede desencadenar mediante una pulsación prolongada sobre cualquier superficie táctil. Además, Alexa y Google Assistant se pueden activar por voz sin tener que tocar los auriculares.
Muchos de estos comandos van acompañados de tonos o comandos de voz (disponibles en francés) para guiar mejor al usuario. Desafortunadamente, este último no baja el nivel de sonido y puede ser completamente inaudible a un volumen de escucha generoso.
Emparejar los auriculares no podría ser más sencillo, gracias principalmente a la compatibilidad con Fast Pair. Se comunican a través de Bluetooth 5.2 (compatible con los códecs SBC y AAC) y admiten una función multipunto que permite el emparejamiento con dos dispositivos al mismo tiempo. Los Live Pro 2 también pueden pausar automáticamente la música cuando se quita uno de los auriculares de la oreja. Sin embargo, la pausa tarda unos 2 segundos en completarse, lo que puede resultar molesto en algunas situaciones.
La aplicación JBL Headphones reúne una serie de funciones y le permite ajustar el nivel de reducción de ruido o la reproducción de sonido mediante un ecualizador. Desafortunadamente, tuvimos muchos problemas para conectar los auriculares a la aplicación en muchas ocasiones, especialmente en un dispositivo iOS.
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