KUWAIT: La oposición, que boicoteó las elecciones parlamentarias durante la última década en Kuwait, obtuvo la mayor cantidad de escaños en la votación del jueves, luego de la cual dos mujeres ingresaron al parlamento, según los resultados oficiales publicados el viernes.
Los candidatos de la oposición, muchos de ellos de origen islámico, ganaron 28 de los 50 escaños del parlamento, derrotando a 20 exdiputados, incluidos tres exministros, en esta elección legislativa, la sexta en diez años.
El tenor de la oposición Ahmad al-Saadoun, que ha presidido la asamblea en tres ocasiones, está entre los ganadores con 12.000 votos.
Entre los 22 candidatos que competían, dos mujeres, la exministra Jinane Bouchehri y Alia Al-Khaled, ingresaron al hemiciclo. Las mujeres kuwaitíes, muy activas en la sociedad civil, perdieron a su única representante en las últimas elecciones de diciembre de 2020.
Además, dos candidatos que cumplían penas de prisión también obtuvieron escaños, los primeros en Kuwait. Hamid Mehri al-Badhali y Marzouk al-Khalifa están acusados de haber participado ilegalmente en elecciones parciales.
A diferencia de otros estados de la región, Kuwait tiene una vida política dinámica, con un parlamento -elegido por cuatro años- con amplios poderes legislativos y donde los debates suelen ser animados.
Sin embargo, este país rico en petróleo se ha visto sacudido durante años por repetidas crisis políticas que obstaculizaron sus intentos de reforma económica.
Entre los principales exportadores de petróleo crudo del mundo, Kuwait está gobernado por la familia gobernante Al-Sabah, que tiene las llaves del poder a pesar de que los elegidos tienen importantes prerrogativas, no dudando en detener a los ministros pertenecientes a la familia real acusados de mala gestión, incluso corrupción. .
Los partidos políticos no están prohibidos ni reconocidos, pero muchos grupos, incluidos los islamistas, actúan como formaciones políticas de facto.
Figuras de la oposición boicotearon las elecciones durante la última década, lamentando la interferencia del ejecutivo en la legislatura.
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